Por: Abigail Espinel Moreno
Estudiante: Instituto Pedagógico Social de Colombia 2017.
TAMALES EL
EDIFICIO DESDE 1958
La idea de hacer tamales nació hace más
o menos 60 años de mi abuelita paterna Julia Camargo de Venegas, luego mi Mamá
Isabel León de Venegas continúo con el negocio durante 54 años.
El arte de hacer Tamales es un trabajo muy
bonito, pesado si pero muy bonito, gracias a este negocio mi mama nos sacó
adelante a mis hermanos y a mí, y
gracias a Dios yo también he podido educar a mis hijos Gerardo mi hijo mayor es
mi gran apoyo en este trabajo, el me lleva me trae me ayuda en absolutamente
todo lo que hay que hacer y María Isabel la menor que estudia Lenguas Modernas
en la Universidad me ayuda los sábados a armarlos y envolverlos.
Recuerdo claramente todo lo que mi mamá
bregaba para conseguir los ingredientes para los Tamales, había que comprar las
gallinas allá en Santa Reyes, mi mamá iba a pie, a conseguir la hoja, las
calabazas, la cebolla, eran unas largas caminatas, y años después Raúl iba en
bicicleta.
Luego empezaba el trabajo duro en la
casa, matar y arreglar las gallinas, pelar y picar calabaza, zanahoria,
desvenar las hojas, cocinar todo y armar los tamales, prender la estufa de
carbón y cocinarlos para luego llevarlos en la carretilla a venderlos en el
cuarto que nos arrendo Don Víctor Nieto en el Edificio y donde hasta la fecha
continuamos comercializando nuestros tamales todos los sábados desde las 4pm.
Han sido miles y miles de personas las que han pasado y siguen pasando a
disfrutar de nuestros Tamales.
Actualmente, las cosas son un poco más
fáciles, el pollo se compra ya despresado pero de igual manera hay que
arreglarlo, picarlo y conservarlo, conseguir la hoja y la calabaza puede
complicarse según la época y el clima; el oficio de alistamiento empieza en
martes haciendo el mercado, consiguiendo todos los ingredientes, arroz, aceite,
condimentos, harina, arvejas, zanahoria, cebolla, calabazas, hojas, el
miércoles todo el día desvenando y limpiando las hojas, el jueves recibir el
pollo, picarlo, adobarlo y conservarlo, picar calabaza, cebolla, zanahoria y cocinar todo, incluso el arroz, el viernes
desboronar el arroz y pasarlo a los platones para el sábado a las tres de la
mañana, realizar la mezcla de todos los ingredientes para armar y envolver los
tamales y ponerlos a cocinar durante cuatro horas.
A las cuatro de la tarde salimos para “El
Edificio” para iniciar la venta, algunos sábados se vende rápido otros no tanto,
pero gracias a Dios durante todos estos años hemos logrado vender todos
nuestros tamales.
Para la época de Navidad y Año Nuevo el
trabajo se incrementa al doble ya que a Dios gracias los pedidos son grandes,
para esos días mis nietas Camila y Verónica también ayudan toda la noche en el
proceso de armado de los Tamales.
Además de los Tamales también se sacan
Empanadas, Arepas y Longaniza artesanal, deliciosas y al igual que los Tamales
de primera calidad.
Cuando los clientes requieran, se hacen
pedidos especiales siempre y cuando los hagan con mínimo ocho días de
antelación toda vez que se requiere conseguir ingredientes adicionales a los
que semanalmente se necesitan.
El 18 de mayo de 2011 la
Alcaldesa Ingeniera Fabiola Jácome condecoró a mi mamá como persona ilustre del
Municipio gracias a la labor realizada con los Tamales durante tantos años.
Entrevista
realizada Sra. Luz Elsa Venegas León por Abigail Espinel Moreno 2018
LA PLAZA DE MERCADO.
Documental por: Nelsy Bolaños - Periodista de la Universidad Minuto de Dios